16 de enero de 2024

Innovaciones en Formación Continua: lo que viene en 2024

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En un mundo en constante evolución, es fundamental mantenerse actualizado y adaptarse a nuevos métodos de formación continua, en especial si se busca mantenerse competitivo en el entorno laboral. El aprendizaje invertido, la gamificación y el aprendizaje social son un claro ejemplo de las principales tendencias que han ido posicionándose como herramientas para promover la autonomía, la motivación y la colaboración entre los estudiantes.

 

Metodologías emergentes en formación continua

La formación o educación continua es un proceso de aprendizaje que se desarrolla durante toda la vida de una persona, para así ir mejorando y optimizando sus conocimientos, competencias y habilidades. Es una manera de aprender, de adaptarse a los cambios y de estar al día en un campo determinado.

Este tipo de aprendizaje puede llevarse a cabo a través de diferentes medios, como cursos, talleres, seminarios, conferencias o webinars, entre otros. También puede ser ofrecida por instituciones educativas, empresas, organizaciones o incluso efectuarse de forma autodidacta.

Como en cualquier campo, la formación continua evoluciona día a día, surgiendo nuevas metodologías cuyo objetivo es el de priorizar la adquisición efectiva de conocimiento a lo largo del tiempo:

 

Aprendizaje invertido (flipped learning)

El aprendizaje invertido o flipped learning es una metodología educativa que cambia la forma tradicional de enseñanza, donde los estudiantes adquieren el conocimiento teórico a través de materiales o recursos preparados por el docente antes de asistir a sesiones presenciales, para luego dedicar el tiempo en clase a la realización de actividades prácticas, colaborativas y de resolución de problemas.

Además, el docente deja de ser la única fuente de conocimiento en el proceso de aprendizaje, para pasar a ser más un guía que facilita y hace más sencillo todo el proceso de aprendizaje. Por otra parte, esta metodología se apoya en el uso de tecnologías de la información y la comunicación, como plataformas digitales de educación o herramientas interactivas, que facilitan el acceso a los recursos, el seguimiento de la participación de los estudiantes y la retroalimentación personalizada.

 

Gamificación y su impacto en la motivación

Consiste en la utilización de elementos y técnicas de juego en contexto no lúdicos, con el objetivo de motivar, incentivar la participación y mejorar el aprendizaje gracias a una educación y atención adaptada individualmente a cada alumno. A fin de cuentas, esta técnica educativa traslada la mecánica de los juegos al entorno formativo y del aprendizaje para lograr mejorar los resultados.

Toda actividad desarrollada dentro del contexto de la gamificación persigue 3 objetivos principales:

  • Fidelización: creando un vínculo entre el alumnado, el profesor y los contenidos que se van tratando en las sesiones, manteniendo así el interés de los estudiantes.
  • Motivación: evitando así el aburrimiento y la desgana, y potenciando el entretenimiento y el interés.
  • Recompensa: premiando el esfuerzo, especialmente en todas las actividades donde no existen alicientes ni estímulos externos al proceso educativo.

 

Aprendizaje social y colaborativo

El aprendizaje social y colaborativo es un método educativo que versa en un enfoque en el cual los estudiantes trabajan juntos para alcanzar un objetivo común. Se basa en la idea de que los estudiantes aprenden mejor cuando colaboran y se apoyan mutuamente. Esto engloba diferentes interacciones entre el alumnado, siempre estructuradas y organizadas debidamente de tal manera que todos los integrantes de la clase puedan apoyarse entre ellos y sacar el máximo provecho al proceso educativo. Así, algunos de sus principios básicos son:

  • Trabajo en grupo: todo el alumnado colabora, buscando alcanzar un objetivo común.
  • Responsabilidad equitativa: entre todos los miembros del grupo, para poder lograr todo lo propuesto en un primer momento.
  • Crítica constructiva: estimulando la retroalimentación positiva, para así ayudar a que todo vaya mejorando y siendo lo mejor. De igual manera, esto ayuda a solventar los inconvenientes que vaya surgiendo.
  • Participación: aportando ideas, feedback, preguntando y generando debate.
  • Reflexión individual y conjunta: se promueve la reflexión sobre el proceso y el rendimiento del grupo, lo cual ayuda a desarrollar el pensamiento crítico y la autoconciencia en los miembros del grupo.
  • Convivencia entre perspectivas: la contribución de cada miembro del conjunto mejora el proceso en su totalidad, ya que cada estudiante aporta su propia perspectiva y experiencia, lo que enriquece el aprendizaje al aumentar su profundidad y amplitud.

En ITC nos dedicamos a tu crecimiento y educación continua para que puedas destacar en un entorno laboral exigente y competitivo, como el actual. Además, queremos recordarte que estamos disponibles para solventarte cualquier duda que tengas acerca de los cursos que ponemos a tu alcance. No dudes en comunicarte con nosotros a través de nuestros diferentes canales. ¡Estaremos encantados de tenerte con nosotros!